• Reduzca el consumo de fibra. Basta con disminuir la ingesta de alimentos integrales como el pan, los cereales del desayuno o las galletas y los suplementos de fibra.
  • No incluya verduras flatulentas. Hay verduras que contienen compuestos aromáticos que el organismo es incapaz de digerir y que generan gases. Las más problemáticas son: alcachofas, pimientos, cebollas, en especial crudas, pepinos, y verduras de la familia de las coles.
  • Prescinda de la lechuga en ensalada. Su alto contenido en fibra insoluble (las partes más blancas del tronco) es lo que produce la molesta hinchazón abdominal. Compruebe si le afecta, y no incluya durante dos semanas lechuga en las ensaladas. Utilice otros vegetales: tomate, zanahoria, germinados, maíz, remolacha o espinacas.
  • Yogur de postre. La hinchazón abdominal puede estar causada por desequilibrios en la flora intestinal. El consumo de yogur, cargado de bacterias lácticas como las de nuestro intestino, de postre, puede ser un buen digestivo.
  • Complemento de fructooligosacáridos (FOS). Los FOS son un excelente sustrato para las bacterias beneficiosas (bifidobacterias), por lo que un complemento tomado de forma ocasional puede ayudar a reducir las molestias y la hinchazón abdominal.
  • Infusiones digestivas efectivas. El hinojo, el anís, la manzanilla o el regaliz tienen propiedades digestivas y carminativas, es decir, que favorecen la expulsión de los gases que se producen tras la digestión. La mezcla de varias plantas puede ser el mejor remedio para tomar en sustitución del café, ya sea de postre o entre horas.