Los repliegues de la oreja pueden limpiarse con una gasa o con un poco de algodón. Los bastoncillos con algodón en la punta que existen en el mercado son muy adecuados y prácticos, pero nunca se deben usar para sacar la cera que se produce en el conducto auditivo, pues comprimen la que queda por detrás haciendo que se formen tapones, y sobre todo, se corre el riesgo de que con un movimiento inesperado alcancen el tímpano y lo rompan.

La cera de los oídos va saliendo por sí sola; no se debe intentar sacar con nada. Los especialistas en otorrinolaringología recomiendan que en el oído no se introduzca nada más estrecho que el codo.

Si luego no se puede secar bien, no es bueno que el conducto auditivo se llene de agua, pues la humedad favorece su infección; por eso conviene no mantener los oídos del bebé bajo el agua, pero tampoco sucede nada porque les salpique o les entre un poco.

NARIZ

Para desobstruir la nariz, se emplea suero fisiológico; pero para lavar los orificios, puede emplearse agua corriente.

OJOS

Si hay que lavarlos y retirar alguna legaña, se debe hacer con una gasa empapada en suero fisiológico, pero nunca con algodón.

UÑAS


Aunque las uñas de los recién nacidos son difíciles de cortar porque son muy flexibles y se doblan entre las hojas de las tijeras, esa propiedad no evita que puedan hacerse daño con ellas cuando mueven descontroladamente brazos y manos.

En los bebés que nacen con retraso, eso puede significar tener que intervenir el primer día, porque ya las tienen largas. Cuando sea necesario cortarlas antes de los 8 ó 10 días de vida, hay que proceder con mucha habilidad y cuidado; puede ser mejor limitarse a limarlas. Desde luego, nunca se utilizará un cortaúñas, con el que fácilmente se les podría cortar en el dedo.

A partir de los diez días o del momento en que se noten más consistentes, se pueden cortar más fácilmente con unas tijeras pequeñas sin punta (de punta roma), manteniendo firmemente sujeta su mano. A veces es mejor esperar a que estén dormidos.

Crecen bastante rápidamente, de modo que suele ser necesario cortarlas una vez por semana.

Los bordes deben quedar redondeados, para evitar que se arañen, y es conveniente limarlos después del corte.

Las uñas de los pies se cortarán rectas, para procurar que sus bordes crezcan por encima de la piel y no se claven en los márgenes. Dado que crecen mucho más despacio, durante los primeros meses no suele ser necesario tocarlas.

GENITALES

En la mayoría de recién nacidos varones, no es posible retirar la piel del prepucio sin hacerles daño y no es necesario para su higiene.

La vulva debe limpiarse sin miedo, separando bien los pliegues, teniendo la precaución de lavarla siempre de delante hacia atrás, para no arrastrar hacia la vagina los microbios que pueda haber alrededor del ano.