Postura y movimientos

Cuando se halla boca arriba, la cabeza ya descansa a un lado y tiene las extremidades menos flexionadas que al nacer.

Boca abajo, puede mantener la cabeza alzada unos segundos, separando el mentón de la cuna y moverla de un lado a otro. Las extremidades inferiores están algo más estiradas y puede hacer algún movimiento de reptación.

Al incorporarle tirando de sus brazos, le cuelga la cabeza.

Tiene las manos cerradas, con el pulgar por dentro de los demás dedos, y persiste el reflejo de prensión, que le hace agarrarse al dedo de un adulto.

Vista

Sigue objetos de colores brillantes (especialmente rojo) o una luz que se desplace en su campo visual, sin perderlos en un recorrido de 90º.

Fija la mirada en la cara de las personas.

Oído y lenguaje

Reacciona al sonido de una campanilla.

Hace sonidos guturales («ggg»), sin vocales.

Conducta social

Puede pasar unas dos horas al día en estado de alerta, mostrando interés por lo que ve y oye.

Fija la mirada observando el rostro de su madre cuando ésta le habla.

Empieza a reaccionar con una sonrisa de satisfacción ante caricias y voces.

Signos de alerta

Boca abajo, no es capaz de alzar la barbilla.

No reacciona ante los ruidos.