Cuando llega el frío las manos se vuelven más ásperas y los labios se agrietan, el aire frío, y la sequedad producida por las calefacciones, y los cambios bruscos de temperatura provocan la  deshidratación, dando como resultado una piel seca, descamada, y agrietada.

Las manos y los labios son unas de las zonas más expuestas al frío y el viento y por lo tanto son las que debes cuidar con mayor atención para conseguir un efecto óptimo.

En cuanto a los labios, tenemos que evitar humedecerlos aunque los notemos secos, la saliva puede provocar una irritación adicional.

Además, su piel es muy fina y no cuenta con una gruesa capa córnea para protegerla. Los labios se vuelven rápidamente frágiles y sensibles a la radiación UV, que es especialmente peligrosa para la piel en invierno.

Esto lo podemos remediar con un bálsamo o cacao labial con protección solar, que proporcione a los labios una capa protectora de grasa y, además, ayude a hidratarlos. Para ello os recomiendo  Eucerin®  Protector Labial que va a cuidar, proteger y regenerar rápidamente los labios resecos y agrietados propensos a la sequedad.

Está compuesto por un conjunto de lípidos naturales que cuidan y protegen los labios, además de un FP6 de protección solar.

Para evitar que la piel de las manos y labios empeore hay que hidratarlas con emolientes adecuados.

Las manos también necesitan un cuidado especial ya que están permanentemente expuestas a las agresiones del entorno. Por ello, necesitan un cuidado especial. Para ello debéis  evitar el agua caliente y un lavado demasiado prolongado, ya que puede resecar más las manos. Y a la hora de enjuagar las hacerlo con agua fría, que cierra los poros, y aplicar una crema teniendo en cuenta también las cutículas y las uñas.

Os recomiendo la Crema  de Manos Eucerin® Repair  que aumenta significativamente la hidratación y disminuye la rojez, sequedad, descamación, grietas, fisuras, picor y quemazón en áreas tratadas comparativamente con las no tratadas, incluso tres días después de dejar de usar el producto. Además, está demostrada una reducción del 40% del eritema en las áreas tratadas y alto efecto protector.

Y no olvidéis que la foto-protección es necesaria también en invierno.